No habrá paz para los malvados, La piel que habito y Caballo de guerra

Tres pelis, tres, he visto en los últimos días. Y las tres grandes, más por su repercusión que por lo que ellas mismas son:

-No habrá paz para los malvados, o de cómo un cubatita de ron puede joderte la vida: de Enrique Urbizu tengo claro desde La caja 507 que tengo que verlo todo. Es uno de los grandes y consigue que Coronado lo borde. Si me preguntan qué peli quiero que gane el Goya, (premios que, por otra parte, me dan igual), lo tengo claro: ésta. Cine negro sin florituras. Coronado en plan salvaje, haciendo un papel, el de Santos Trinidad, que parece hecho a su medida (y con esto no digo que Coronado sea como Santos).
Todo empieza cuando a Santos le cierran el bar y se busca un garito en el que echar la última, yendo a parar a un puti. No quieren servirle, ya está todo fregado, las chicas se han ido…pero a Santos le apetece un ron cola y enseña la placa. Entonces sí, le ponen el cubatita y todo lo que quieran. El dueño le invita al cubata y a que vuelva cuando quiera a cuenta de la casa, y lo dice pasándole el brazo por los hombros y por ahí Santos no pasa. Que nadie me toco que le parto los dientes. Y así se lía a matar a todo el que pilla por ahí… pero alguien le ve y escapa. A partir de entonces asistimos a dos líneas de investigación: la de Santos para dar con el que se le ha escapado, y la de poli por esclarecer lo que –según parece es un ajuste de cuentas entre bandas- ha pasado en el puti.
El final es sobrecogedor y con reminiscencias del 11 M.
No digo más.
Soberbia. En palabras de Santos: “Rock ‘n’ roll”.
PD: Juanjo Artero, por primera vez, me parece creíble.

-La piel que habito: A éstas alturas supongo que habrá poca gente que no la haya visto. Si eres uno de esos te aviso que es mejor que la veas sin saber nada de ella, que dejes que te sorprenda como me sorprendió a mí, porque desde luego, el argumento es de lo más original.
De Almodóvar suelen gustarme sus pelis. Creo que ha habido un par (Kika y alguna otra que olvido) que no fueron de mi agrado.
Merece la pena verla y lo va a tener difícil frente a No habrá paz… en los Goya.
Sin embargo, Banderas no acaba de convencerme.

-Caballo de guerra: La última de Spielberg, otro del que hay que ver todo, todo, todo.
Dos horas y medias de peli me parece demasiado para una historia que, estando bien, podía haberse recortado un poco.
La historia nos cuenta todas las peripecias que un caballo va pasando desde que nace hasta que se hace adulto. Su vida pasando por diversos dueños, sus sufrimientos durante la Primera Guerra Mundial y su “generosidad” y “corazón”. No es una peli pastelona, pero tampoco es excesivamente dura. Estaba convencido de que los personajes iban a resultar más dickensianos. Los malos previsibles y malísimos y los buenos pobres y buenísimos. Y afortunadamente no fue así.
La ambientación muy buena, la música de John Williams ésta vez no da en el clavo y los actores y animales lo hacen bien.


En resumen: las dos españolas muy bien. La de Spielberg decepciona un poco.