Corría 2009
cuando una noticia estremeció al mundo. Lo sé, lo sé; usar el verbo estremecer
es algo exagerado. En realidad ni siquiera fue una noticia de esas de las que a
final de año, al hacer balance, se cuelan en el top diez. Ni en el veinte.
Puede que sí en Cuarto Milenio, desde luego, ahí sí. Pero en prensa
generalista, solo si la noticia hubiera sido en verano se le hubiera dado un
mayor seguimiento. El caso es que la imagen de la noticia, al menos a mí, se me
quedó grabada y la usé encantado para mi libro, Valeria.
Reseña completa en LyL
No hay comentarios:
Publicar un comentario