La grieta, de 167 metros, calificada de "una escultura subterránea", comienza primero como un delgadísimo hilo en el piso, y va ensanchándose y ahondándose según avanza, zigzagueante, a lo largo de la gigantesca Sala de Turbinas de la Tate Gallery.
"De verdad está allí, es real", subrayó Serota (director de la galería), que admitió que la obra de Salcedo había suscitado interrogantes acerca de si perjudicaría la estructura arquitectónica del edificio.
Pero se comprobó que no, dijo Serota, que añadió que la grieta, que fue realizada por Salcedo y su equipo en otro lugar y luego instalada en el museo, en un proceso misterioso que tomó cinco semanas, será rellenada en abril, cuando concluya la exposición.
Pero se comprobó que no, dijo Serota, que añadió que la grieta, que fue realizada por Salcedo y su equipo en otro lugar y luego instalada en el museo, en un proceso misterioso que tomó cinco semanas, será rellenada en abril, cuando concluya la exposición.
Fuente: Correo del Caroní.
Pues eso. ¿Arte?
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